"Triunfo el Movimiento. Golpe de Estado y represión en la comarca del Bierzo" es un artículo del reconocido historiador berciano Alejandro Rodríguez (no confundir con Alejandro Martínez, que es quien escribe estas líneas). El artículo fue premiado con un Accésit en el II Premio de Investigación Antonio Estévez, del Instituto de Estudios Bercianos (IEB) en 2016. La publicación tiene una extensión de 30 páginas, más la bibliografía y unos excelentes anexos con imágenes de archivo, fotografías y un listado de algunos concejales represaliados en otros municipios. Puede descargarse aquí:
Una sólida investigación que pretende dejar atrás los mitos sobre el periodo y que cobra importancia en un momento en el que se banaliza el franquismo. El artículo aporta luz sobre el uso institucionalizado de la violencia como elemento fundacional del franquismo. El texto se centra en las corporaciones municipales de Ponferrada y Villafranca del Bierzo y la represión que sufren tras el golpe de Estado. En las dos cabezas de los partidos judiciales de la comarca, “las condenas a muerte y las desapariciones forzadas ejercerán de medidas ejemplificadoras para el control social de la población”, según el historiador.
Rodríguez explica que
El Bierzo “al ser un territorio que queda bajo poder de los militares
sublevados desde los primeros días, podemos analizar a la perfección las
estrategias represivas y de control social empleadas por ese nuevo Estado que
surge a partir del 18 de julio.”
El golpe de Estado en
Ponferrada, el papel de los mineros en defensa de la legalidad democrática de
la república española, el enfrentamiento en el cuartel de la guardia civil o la
detención del Teniente de la Guardia de Asalto que dirige a los mineros
asturianos, Alejandro García Menéndez, con las palabras “triunfó el movimiento,
queda usted detenido”, son algunos aspectos tratados.
Además, traza una
biografía de los miembros de la corporación municipal ponferradina las
distintas formas en que fueron represaliados. Estos serían Juan García Arias,
Teodosio Cuevas Francisco, Ricardo González García, Arturo Pita Pérez,
Francisco Sánchez Rodríguez, Carlos Garzón Merayo, Ángel Cañibano López, Manuel
Fernández González (a) Cantina, José Martínez de Castro.
En la otrora capital de
la provincia del Vierzo, Villafranca,
la situación es similar. Tras el golpe se detienen a los falangistas y los
obreros locales, con apoyo de un nutrido contingente de mineros de Fabero, presionan
al alcalde para que acceda a incautar armas que les permitan defender el
resultado de las urnas.
Su posterior desarme
por parte del alcalde el día 21, facilita la entrada de una columna de militares
al mando del Comandante Manso, que toma la casa consistorial sin resistencia y
detiene a todas las personas que allí se encuentran. El destino de la
corporación compuesta por Recaredo del Potro Otero, Dalmiro Pérez Vázquez,
Antonio Gabelas Álvarez, Francisco Delás Trabadillo, Antonio Sobrín
Veintemillas, Antonio Vázquez del Valle, Fabriciano García Arias, Emilio Silva Faba,
Belisario López Fernández, será similar al de sus homólogos ponferradinos.
Algunos como del Potro
todavía consta como desparecido, aunque se sospecha su asesinato. Otros,
liberados en un primer momento, serán fusilados después. También Antonio
Vázquez del Valle, fallece en prisión. Emilio Silva Faba, quizás es el más
conocido de todos ellos. Su exhumación en el año 2000 dio origen a la
Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), siendo su
nieto, Emilio Silva, el presidente de la misma.
El estudio constata que
de las 20 personas que ejemplifica, 14 de ellas pagan con su vida el apoyo al
gobierno constituido. Además, evidencia la existencia “de varios tipos
represivos, desde el uso sistemático de los consejos de guerra hasta la
utilización de desapariciones forzadas de personas, empleadas todas ellas como
forma de amedrentamiento, de implantación del miedo y el silencio en la
sociedad. La estrategia de control social de la dictadura comienza en este
momento.”
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